A veces sufres reencuentros con personas desconocidas. Las miras, así, de lejos, todo lo lejos que antes pudiera ser cerca, a millas de distancia, lejano como la luz. Repasas fisonomias como si nunca las hubieras acariciado, Mirando los surcos, los viajes, las carreteras hacia sus ojos, las cunetas en las comisuras de los labios. Casi completamente alejado de tu memoria, casi ya sin recordar antes, cuando no era un juguete viejo y tu no eras esa niña quelo mira con extrañeza de vieja.
Y te das cuenta de que ya no recuerdas. Es el juego de la memoria, cuando se deja por el camino en las estaciones de trenes que pisas cada día, en los trayectos, cuando pierdes parte de lo que viviste porque se convirtió en materia oscura, cuando se volvió prohibido para la mente o para el corazón. Y te fascina la capacidad de tu subconsciente para bloquear una parte de tu vida que, ahora, parece que nunca sucedió.
Pero está ahí, como un punto de libro perdido en la novela. Y te marca aún ahora, aunque no lo recuerdes.
2 comentaris:
Mncanta! pk todo lo que vives te marca de una manera o otra, y por mucho que kieras nunca puedes huir de ello, pk te condiciona y forma parte de ti.
Besos!
Senyoreta, que em titlleu de nazi és un poc fort, però com que us tinc en gran estima us ho perdonaré. Celebro les vostres noves adquisicions informàtiques i espero que hagueu passat un bon estiu. Veniu aviat a veure què hem comprat amb el vostre premi.
Publica un comentari a l'entrada